No podríamos estar más contentos con nuestro vehículo eléctrico híbrido con enchufe (PHEV). El auto es lo suficientemente grande y cómodo para todas nuestras necesidades. No hemos tenido problemas con el auto en los 25 meses que lo hemos tenido. Tenía más o menos toda característica que uno pudiera imaginar. Muchos más de los que llegaremos a utilizar.

El PHEV nos gustó ya que el 95% de nuestros viajes son del tipo eléctrico (aproximadamente 30 millas), y además no tenemos que sufrir la ansiedad de las distancias muy comunes en los autos completamente eléctricos. Si tenemos ganas de conducir 400 millas, nos subimos al auto y nos vamos. El auto tiene aproximadamente 19,000 millas y rinde de promedio más de 122 millas por galón. Además, se carga prácticamente de la noche a la mañana cuando las tarifas de electricidad son más bajas, utilizando una toma de corriente regular de 110-voltios.

Debido a que el PHEV es un auto híbrido enchufable, sigue siendo elegible para utilizarse por una sola persona en la categoría de viajes compartidos. Aunque no utilizamos mucho esta característica, se siente bien saber que está disponible. Hace unos años, hubiese sido vital para nuestra transportación diaria.

El crédito fiscal mayor por comprar un auto híbrido enchufable versus un híbrido estándar en realidad hizo que el PHEV sea menos costoso que un híbrido normal. Simplemente era lo máximo en todos los niveles. Si por alguna razón perdiéramos este auto, no dudaría un instante en comprar otro.